Esto es lo que hoy ha afirmado Francisco en la homilía de la misa celebrada en la capilla de la Casa de Santa Marta.
Ha mencionado el Salmo que dice: “Los cielos narran la belleza de Dios”
“La gran belleza es Dios” ha enfatizado el Santo Padre.
Nos ha puesto a los creyentes en alerta de los peligros de divinizar lo terrestre, adorando cosas o personas que son pasajeros.
“No pensamos cuan superior es el Señor, que nos ha creado y que es principio y autor de la belleza”
“Es necesario mirar más allá. Los creyentes no somos gente que vuelve atrás, sino que va siempre adelante”
Francisco ha pedido que vayamos siempre adelante, admirando las cosas de la tierra, pero sin divinizarlas.
