En la homilía de la misa de hoy, celebrada en la Capilla de la Casa de Santa Marta, el Santo Padre ha pedido a todos que recemos al Señor para que la Iglesia no caiga en la mundanidad.
“Que el Señor nos dé la gracia de mantener y custodiar nuestra identidad cristiana, contra el espíritu de la mundanidad que siempre crece. se justifica y contagia”
“La mundanidad es hacer lo que hace todo el mundo, ser como todos, ser `normales´”
Jesús en la Última Cena. pidió al Padre que liberara a los suyos de todo espíritu del mundo “porque destruye la identidad cristiana”
Ha pedido que estemos atentos a las raíces venenosas que nos alejan del Señor, porque “comienza como una raíz pequeña, pero al final contagia y termina en la abominación”
Nos ha invitado a preguntarnos “¿Como es mi identidad, cristiana o mundana?