FRANCISCO HA DEDICADO HOY LA AUDIENCIA JUBILAR, QUE SE CELEBRA UNA VEZ AL MES, A LA PIEDAD
En un día lluvioso que no impidió que una multitud escuchara al Papa, este ha dedicado esta Audiencia Jubilar a la piedad, como manifestación de la misericordia de Dios.
Como siempre que hace mal tiempo, a los enfermos se les ha instalado en el Aula Pablo VI, donde han seguido el acto a través de grandes pantallas.
“La piedad es uno de los dones del Espíritu Santo. En el Evangelio se presenta el grito espontaneo de personas enfermas, endemoniadas o afligidas que dicen a Jesús: `Ten piedad´”
“A todos Jesús respondía con la mirada de la misericordia y todos percibían el amor de Dios mismo. La piedad es una manifestación de la misericordia de Dios”
El Santo Padre ha pedido no confundir la piedad con la lástima o compasión.
“Para Jesús, sentir piedad es compartir la tristeza y transformarla en alegría. Pero no debemos confundir la piedad con la compasión que sentimos a veces por los animales que viven con nosotros”
“A veces vemos gente apegada a los gatos o a los perros y dejan sin ayuda el hambre del vecino”
“También nosotros estamos llamados a actitudes de piedad, quitándonos de encima la indiferencia. Miremos el ejemplo de la Virgen María, que se hace cargo de cada uno de sus hijos y que es para los creyentes el icono de la piedad”